Las siglas ACTIC corresponden a la denominación «acreditación de competencias en tecnologías de la información y la comunicación».
El ACTIC es el certificado acreditativo de la competencia digital, entendida como la combinación de conocimientos, habilidades y actitudes en el ámbito de las tecnologías de la información y la comunicación que las personas utilizan en situaciones reales para conseguir objetivos determinados con eficiencia y eficacia.
El ACTIC permitirá a cualquier persona de más de 16 años demostrar sus competencias TIC mediante una prueba por ordenador. Tanto la prueba como la obtención del certificado serán telemáticos.
Las personas que superen satisfactoriamente la prueba tendrán un certificado acreditativo que emitirá la Generalitat, que los posibilitará acreditar un determinado nivel de competencias (básica, media o avanzada) en TIC ante de cualquier empresa o administración.
Por medio del ACTIC, la persona titular para acreditar, ante cualquier instancia pública o privada, sus competencias en tecnologías de la información y la comunicación.
Sus contenidos incorporan una perspectiva global sobre la sociedad del conocimiento, y sobre las buenas prácticas, el civismo y la cultura.
Las personas con discapacidad igual o superior al 33% tienen que declarar esta circunstancia en la solicitud y tienen que lo tienen que acreditar con documentación oficial ante la Oficina Gestora.
No, hay que aprobar el certificado medio (nivell 2). Los exámenes de ACTIC se dividen en tres niveles, los tres se componen, cada uno según el nivel, de la acreditación de conocimientos en distintas competencias a nivel informático, tratamiento de textos, imágenes, presentaciones, hojas de cálculo o bien gestión de datos.
En los tres niveles se asesora a cada alumno/a sobre los diferentes tipos de preguntas que tienen estos exámenes: tipo test, simuladores, listas desplegables, preguntas de relacionar, verdadero y falso, etc; para que sepas cómo responderlas adecuadamente.
La tasa que hay que pagar para el examen de cada uno de los niveles es:
No hay que pagar la tasa si la persona está en el paro, si está jubilada o si sufre una discapacidad igual o superior al 33%.
También se puede obtener una bonificación de un 30 o un 50% si se es miembro de familia numerosa o de familia monoparental, de categoría general o especial, respectivamente.
Las personas con discapacidad igual o superior al 33% pueden pedir en la inscripción de la prueba la adaptación o adecuación del tiempo o de los medios materiales necesarios para poder realizarla.
La tramitación es telemática. Para poder hacer la prueba de evaluación hay que pagar previamente la tasa legalmente establecida, si no se cumple uno de los supuestos legales de exención. También hay supuestos de bonificación (descuento).
El procedimiento se puede resumir en los 4 pasos que se muestran a continuación. Es muy importante, sin embargo, leer atentamente el apartado Información detallada del procedimiento para saber qué hay que tener en cuenta en cada momento.
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